Esta receta procede de la enciclopedia de cocina de Signo Editores, fue el premio del concurso de Entre fogones y cazuelas, que ganó mi receta de Crema Helada con nougatine de nueces, una chulada. Pues esta receta fue la que más me ha llamado la atención por ahora, en el original se hace con sardinas, pero a mí me apetecía más hacerla con gambones, congelados, naturalmente, que tienen un precio bastante asequible y dan muy buen resultado.
Continuando con la intervención en el blog de los miembros de mi familia, sólo quedaba la pequeña, la famosa camerawoman, cuya intervención es mucho más seria que las apariciones que hace de vez en cuando en mis recetas. Hoy nos trae estas delicias para el desayuno. Os dejo aquí su particular entrada: Hola! La primera vez que salgo haciendo algo y no podía faltar el chocolate! Pero tiene que ser Nutella…. la nocilla es para…. para los anuncios! >.< Cuando vayáis a calentar la plancha, no la pongáis al máximo, pero que este bastante caliente. Y no apretujéis las tortitas con la espatula nunca, tienen que quedar fluffy esponjosas :3 Espero que os guste un desayuno o merienda a modo de festín….hmmm chocolate! (Sí… me he pimplao 4 de 10 para el desayuno jujujuju)
Algunas veces en casa guisa él y, para dejar constancia de ello, he aquí esta receta sencillísima pero sabrosa y muy quedona. Espero que disfrutéis con el vídeo, yo me lo pasé genial grabando, es mil veces más divertido grabar que ser grabada y mucho más relajado…dónde va a parar.
En las largas tardes del verano infantil, Madre nos reunía en la cocina y nos daba tareas para hacernos dulces fáciles y ricos. Estas galletas, hechas con su genuina máquina de picar carne, no son de las fáciles, pero tienen la ventaja de requerir abundante mano de obra…o por lo menos una pareja que te ayude. Las galletas no son sólo vintage por lo lejos que quedó mi infancia, ni por su forma, por la máquina de galletas o por la caja que las contiene, sino por su sabor. Eran las favoritas de mi hermano Miguel, quizá porque son estupendas para mojarlas en leche con cacao y sorber el líquido aspirando por alguna de las partes de la galleta. Recuerdo que Madre volvió a sacar la máquina hace no tanto para una de las visitas que le hizo mi hermano. No es verano, pero sí un buen momento para hacer regalos, así que Miguel, estas galletas son tuyas, las congelo y te las doy cuando vengas. Descargar la receta escrita.