Tarta de manzanas fácil

La tarta de manzanas ha sido mi especialidad cuando era una jovencita, incluso me dieron un premio. La que ganó el premio no es ésta, es un poco más complicada, pero hay tantas variedades que la dejaré para más adelante porque además tiene una historia de infancia.
La peculiaridad de esta tarta es su facilidad, no tiene más complicación que poner la clara de un huevo a punto de nieve, que se hace en un periquete con el batidor eléctrico y un poco más de tiempo con el batidor manual.
Sale muy rica, se le pueden poner más manzanas en su interior, yo le puse menos porque quería probarla más ligera. Es importante usar un molde algo más grande, yo le puse uno pequeño y se me rebosó, porque me olvidé que sube un poco.
Pues ojalá os guste.

Concurso de Cocacola.

Come bien cada día con Coca-Cola

Estoy contentísima porque soy finalista del concurso de Cocacola «Come bien cada día«, hoy lo ha hecho público Txaber Allué , el Cocinero fiel. Hay más fases y yo me doy con un canto en los dientes de haber llegado hasta aquí.

La segunda fase depende de los votos populares, si os apetece votar podéis hacerlo aquí.

¡Qué ilusión!

Menú rápido: Judías verdes salteadas con jamón y calamares fritos

La realidad de mi cocina está muy cargada de agobios y en la misma medida de placer. Lo corriente son las prisas con las que hoy he grabado, comidas sencillas, de batalla. Y mi familia con los tenedores en ristre esperando a que haga la última foto, quejándose y juramentando por la madre que parió al blog…que no es otra que yo misma.
Lo mejor es cuando tengo ingredientes frescos, comprados el día antes, y puedo trabajar, aunque sea contra reloj, en algo rico y sano. Pero la improvisación atraviesa la cocina y la nevera como Pedro por su casa, y tengo que apañarme con las típicas cosas que vegetan tristemente en los estantes. Envidio ferozmente a aquellas personas de neveras bien surtidas y organizadas, limpias y frescas, con todo perfectamente envasado y los recursos necesarios para pergeñar una exquistez en el momento que se lo proponga. Seguro que no tienen el bacon amojamándose en su envase de plástico semiconsumido pero con las típicas dos lonchitas sequeronas.
La organización no es mi fuerte y además siempre ando metida en mil cosas que me interesan, por eso la nevera me mira con rencor y de vez en cuando destila un veneno terrible que me lanza a la cara en forma de pimiento comido de moho, calabacín blandurrio y marronáceo o tuperware olvidado con no sé qué seres, venidos de otra galaxia, haciendo fiesta en su interior. ¡Qué mezquina y artera, la muy bruja, no me pasa ni media!
Hoy he querido hacer este vídeo porque es lo normal, lo sencillo, el menú fácil y sano que se hace con frecuencia en casa. Eso sí el jamoncito, tan bueno, no es de todos los días.
Y ya véis que no me da tiempo ni a ponerme el delantal.



Videoblog de recetas

Lenguas de bruja. Galletas para el 31 de octubre

No soy yo aficinada al Halloween, una costumbre norteamericana que año tras año se va imponiendo en España y otros países de Europa, pero veo lo bien que se lo pasan los niños.
Ví estas galletas en el blog Cuisine de Campagne, que es uno de mis favoritos y del que he tomado algún préstamo en mi cocina habitual, con blog y sin él. El original, quiero decir el que hace la dueña de la receta, es más impresionante que el mío pero seguro que con práctica me saldrán mejor cada año.
Las dejo aquí por si os vienen bien estos días.

Tarta de cumpleaños. Renovando masa de Rosco de Reyes

Hoy es el cumpleaños de Camerawoman que está, la pobre, asistiendo a clases por la mañana y por la tarde de becaria en una productora. Me ha pedido una tarta hecha con la masa del Rosco de Reyes, pero rellena de crema y cubierta de chocolate. Dicho y hecho, ahí está la foto de arriba.

Es muy sencilla, sólo hay que preparar una crema pastelera para el relleno y la cobertura es chocolate con leche diluido en un fondito de leche y luego otro poquito más de leche con una cucharada de maizena o de harina de maíz, así queda más jugoso.

En vista de que siempre sobra masa hice el bollo de abajo: extendí con la mano un poco de masa y dentro le puso una oncita de chocolate con leche, luego la enrollé y la puse en un molde, así siete rollitos, que dejé levar en el horno como 45 minutos (igual que en el rosco) y después poner la temperatura de horneado y así queda, como un bizcocho de pequeños pan con chocolate (pain au chocolat).

Estoy esperando que vuelva a ver qué cara pone.