El pan de pita es delicioso..y sobre todo es más fino que el que comemos habitualmente, por lo tanto es una opción perfecta para bocadillos cuando no quieres excederte con el pan.
La receta es muy sencilla y con ingredientes naturales. En otro vídeo pondré algunas propuestas para hacer con el pan de pita, tanto de relleno como de otras maneras de usarlas.
Hubo una historia asociada a la primera pita que comí en Le Marais, concretamente en la plaza de los Vosgos de París, hace unos años ya. La habíamos comprado en un tenderete de hebreos del barrio. Yo no había tenido ningún contacto con una comunidad judía más que a través de los libros de historia, o de mis clases de hebreo, porque hubo un tiempo que estudié hebreo clásico. Allí sentada en la plaza de los Vosgos, un precioso mes de junio parisino, hablaba distendidamente de cosas intrascententes, cuando a mi espalda oí el sonido de una lengua rara, pero de alguna forma familiar, era askenazi, la vieja lengua de los judíos del norte de Europa, fundamentalmente alemanas. Me sorprendió tanto oir esa lengua vivita y coleando que, con disimulo, me volví para a mirar a las personas que así conversaban. Se trataba de dos hombres y una mujer, de más de los 70 probablemente, ella pelirroja y canosa. Como era verano llevaban mangas cortas, y como era verano pude ver en el interior de sus antebrazos un número tatuado, ya borroso, sobre las pieles envejecidas. La visión de esos números en esas personas, normales y próximas, que disfrutaban junto a mí de una preciosa tarde de verano, me conmovió como ninguna lectura o película del Holocausto. Calculé, por aproximación, que serían niños cuando les tatuaron el brazo con un número, y allí estaban a mi lado, como si ninguna tragedia hubiera ocurrido en sus vidas.
Siempre que como pita me acuerdo de ellos.
Descargar la receta escrita
Videoblog de recetas
Creo que no tardaré en hacerlo. ¡gracias por la receta!
Anoto la receta
los preparé una vez y nada que ver con los comprados, son mil veces más ricos.
Me encanta el pan de pita, me llevo la receta.
Besos
Me vuelve loca este pan, pero me da pavor hacerlo en casa, el miedo a los panes no me va a llevar a ningún buen puerto, guardo la receta porque de esta me lanzo si o si.
Me llevo la receta, con tu permiso claro. Bss.
http://www.cocinaamiga.com
En 10 dias me voy a Paris, jajaja!! me acordare de ti en «le marais»
Hola,después de mucho tiempo sin hacerlas y tras verlas en tu blog,las he hecho esta noche para cenar.Han quedado buenísimas,y mañana,tras la votación por mayoría absoluta,me espera volver a amasar.
Gracias por recordarmelas.
Por cierto,conocí hace unos días tu blog,felicidades,es estupendo.
Un saludo.
Viéndote hacer, todo parece superfácil, querida… tú si que sabes 😉
Como lo hecho en casa ninguno. Me llevo la receta. Besos
De verdad Luz, eres la mejor amasadora de la red, y cómo se ha ahuecado ese pan, alucinante. Ahora, la berenjena muy buena ¿eh? pero no puedo dejar de imaginármelo con un chorizo dentro. Un sábado, a media mañana….jajaja
Vaya pinta! Con estos me voy a animar, me ha encantado ver cómo se inflan en el horno y cómo le metes la tijera para abrirlo y rellenarlo, qué bueno!!
Besos
Por cierto, que el otro día te dejé el comentario sobre la receta porque venía de ver el vídeo, que quería yo preparar pan de pita (que por cierto, ha quedado buenisimo!), y no me paré a leer el post. Y hoy he podido leerlo con más detenimiento….qué historia, la verdad es que emociona leerte relatar aquél «encuentro» en una plaza de París.
un beso Luz
Interesante blog,me gusta
Saludos